La región de Emilia Romagna, destaca por su diversidad vinícola. A pesar de ser considerada una entidad administrativa única, Emilia Romagna se distingue por la variedad de vinos que produce. Con 60.000 hectáreas, posee llanuras (75% de los viñedos) y montañas de 400 a 600 metros. El rendimiento de hectolitro por hectárea es alto, privilegiando calidad en montañas. Influenciada por el Adriático, su clima tiene veranos calurosos y secos, inviernos húmedos con brumas en llanuras. Vides ancestrales de etruscos y romanos (s. VII a.C.) marcan su historia. La diversidad geográfica influye en los diferentes terrenos y distingue a los vinos de Emilia Romagna, otorgándoles características únicas y variadas.